Pastel de chocolate en kéfir
8 porciones1 hora 30 minutos
Harina de trigo - 450 gr, Huevos de pollo - 2 piezas, Azúcar - 200 gr, Kéfir - 200 ml, Aceite de girasol - 5 pl, Cacao en polvo - 3 cucharadas, Soda comestible - 1 cucharadita, Vinagre - 0.5 cucharadita, Mantequilla - 250 gr, leche condensada - 350 ml, nueces - 50 gr, Curaga - 50 gr, Ciruelas Negras - 50 gr, Chocolate Oscuro - 100 gr, Caramelos - 50 gr, Vanilin - 1 gr
Cocinamos los ingredientes.
Ponemos dos huevos grandes en el recipiente.
A los huevos añadimos azúcar y cacao.
Batir cuidadosamente con una corola o mezcladora para que el azúcar se disuelva por completo.
Infundimos en la mezcla de kéfir (es mejor usar frío, inmediatamente fuera del refrigerador). Revolvemos con la corola.
Vertemos el aceite de girasol, revolvemos.
Añadimos el refresco extinguido con vinagre.
Mezclamos en partes la harina cribada varias veces a través del tamiz para enriquecerla con oxígeno, y mezclamos suavemente.
Dejamos reposar la prueba durante unos 20 minutos para que la masa se enriquezca bien con dióxido de carbono contando la reacción del kéfir y el refresco extinguido con vinagre. Durante este tiempo, calentar el gabinete de viento a 180 grados.
Pegamos el molde con papel de aluminio, lo engrasamos con aceite de girasol y vertemos la masa en él. Horneamos durante unos 20 minutos. La voluntad es probada con un palillo de dientes.
Cuando la corteza se hornea, lo sacamos. Dejamos que se enfríe un poco, lo cortamos en dos. Los bordes se recortan, los vamos a necesitar para el revestimiento.
Preparamos la crema. Batimos la leche condensada con una licuadora con mantequilla y una pizca de vanilina. Quién ama el posguerra, puede agregar el polvo de azúcar.
El curagu, las ciruelas y las nueces se lavan cuidadosamente, se cortan en trozos pequeños. Recogemos el pastel. Una corteza se lubrica con crema, se espolvorea con ciruelas, pollos y nueces.
Frotamos chocolate en un rallador grande.
Cubrimos con una segunda corbata. Engrasamos desde arriba con crema. Agachamos desde arriba y desde los lados con migas trituradas y chocolate rallado.
Decoramos con caramelos (flores de amapola) o cualquier otro a voluntad. Dejamos el pastel por la noche en el refrigerador para impregnarlo. ¡Una agradable fiesta de té!